martes, junio 26

Soneto imperfecto

Somos estos cuerpos derretidos
tu oro y tu plata fina
con mi estaño espurio confundidos
bajo la noche opalina.

Qué será de nosotros querida
el hielo sacro y el rocío
despuntan una olvidada herida
y de esta piedra surge el hastío.

El calor nos ha dejado, indiferente
sin saber lo que es tuyo y qué es mío
enlazados así frente a frente.

El amor resultó un desierto baldío
cuyo viento es un polvo asfixiante;
la ceniza mustia de nuestro amorío.

Gozador muerto en el puerto

Hoy día el fresco del boyante
le curtió el rostro con sus herramientas
de alfarero. ( ) Contextualicé los dos puntos
que no se ven ni se tocan
tardíos y protuberantes como un
desespero en la garganta apuñalada.
Postulósele de rey mendigo por las horas
mal gastadas y desayunadas
un soplo fue la última frase y,
en muriendo,
el muerto llegó antes
que las últimas voluntades.
Mal nacido de vientre travesti
no acalles a quien por derecho
le corresponde un punto final.

Elegía I

Háblame de tu locura
que viene de noche y te roba
los cardos para perfumar tu
poncho de fotografías y tesoros.

Háblame de las horas sin nombre
por las que estuviste presa
donde el hambre engendró
la sonrisa que perfuma tu estar.

Háblame de tu niñez olvidada
de los payasos de greda y pasto
con los que armaste esta alcoba
con el sexo de arrayanes perfumado.

Háblame del nogal en tu vientre
de miedo y soledad enraizado
y de sus nueces verdes
de tu alma abierta el perfume.

Háblame de todos los senderos
que enlodaron tu andar felino
De todo eso, ¡y más!
¡Pero háblame!

No te duermas amada mía
veo como un faro tu cansancio
por tan larga travesía
llegaste luz y ahora silencio
tus labios callan su melodía.

No has muerto yo sentencio
tu recuerdo perfuma mi elegía.

jueves, junio 14

Recordarse

Recordarse un otoño recostado
sobre la garita desvencijada del tiempo esquivo
burlando gorriones en su vuelo anémico
y retratando muy bien estas hojas que caen
como si un hilo las transportara por niños en sus juegos
las manos agrietadas del verano se despiden.

Y estabas recostado, así te pienso, con el lago y sus árboles
descansando las cenas y los amores arrebatados
dibujando el viento que se coló una noche por la lana
trenzada en un invierno antiguo, por manos de abedul
ya habías crecido del verano y exhalabas sus gestos

Ya sabías que el otoño también se desvestiría, por eso
te quedaste en su lecho hasta entrada la noche
y aunque la esperanza verde había caído polvorienta
estiraste las piernas con desgano y cerraste los ojos
pensando que el invierno sería una leyenda que no conocerías.

miércoles, junio 6

De Carácter Esquivo

Hacia donde escapas felicidad?
por qué tu carácter esquivo
si es tan fácil venir y sentarte
a mi lado

susurra: un viento que a todas partes va
un mar que te podría llevar a donde perteneces
todo es fuga del ahora.

bajo algún árbol pasaste la noche? que dejas
un rastro de hojas y resina
una huella fresca y verde en mi pecho?

con las ramas por ti perfumadas
he construido mi lecho
para no esperarte más hasta que vengas

y por si no vienes
para dormir y no correr en vano.

domingo, junio 3

La Puta Angustia

Una caja de alfajores;
un chocolate amargo con
avellanas
y todavía
no apago la angustia

nada, ahí esta y se queda
con sus ojitos verdes y
chiquitos.

las horas de mañana vienen
al trote de ejercito
y tiemblan mis entrañas

la indigestión no es menor
y de tanto mate
mate que te mate
es de adentro afuera y vamos

y después no duermes
bailando a cabezazos sobre la
tierna almohada estéril

¡qué diablos encarnados!
se follan entre todos la angustia pasajera
y ahí viene dando gritos… corre que te corro
corre que se acaba

y por vacías que estén
mis canastas frutales
después de que el segundero
las golpee implacable con su látigo
del reproche
del fracaso
por vacías volverán llenas
de paz y una angustia que de tanto follar
se ha vuelto puta
un par de guiños verdecitos
y se va a que se la cojan
los rojos en el infierno.

Y yo
con mi almohada en celo.